El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, presidió la solemnidad de San Vicente Ferrer, patrón de la Comunidad Valenciana, con la celebración de una misa de pontifical en la Catedral y la procesión por el centro histórico de Valencia . 

Después de un volteo de campanas, dio comienzo la eucaristía cuya homilía corrió a cargo de un fraile dominico valenciano, Jesús Villa, para seguir la tradición basada en las predicaciones que en el siglo XIV hizo el santo valenciano, perteneciente a la misma orden, desde un púlpito de la propia Seo que se conserva junto al altar mayor, según han indicado hoy a la agencia AVAN fuentes de la comisión de Liturgia del Arzobispado.

En la celebración intervino la Coral Catedralicia que ha cantó, acompañada de órgano, la Misa en valenciano “Nostra Pregaria”, compuesta por el prefecto de música sacra de la Catedral, José Climent, han añadido. 

Una vez finalizada la misa, tuvo lugar la procesión cívica con ofrenda de flores a San Vicente Ferrer, que ha partido de la Plaza del Ayuntamiento hasta la Casa Natalicia y que finalizó con el disparo de una mascletá. 

Asimismo, por la tarde, monseñor Osoro presidió la solemne procesión general con las asociaciones vicentinas que partió de la Catedral por la Puerta de los Hierros con la imagen del patrón. En la procesión, miembros del Altar del Mar llevaron la reliquia del santo donada al Colegio Imperial de Niños Huérfanos San Vicente Ferrer.

La procesión continuó hacia la calle de la Paz para llegar a Capitanía General, antiguo convento dominico donde residió San Vicente Ferrer. Posteriormente, la Casa Natalicia del santo, la iglesia de San Esteban y, finalmente, la procesión regresó de nuevo a la Catedral.