SILLA CF 2-2 CD JUVENTUD PICANYA
De inicio, el Silla CF salió en busca de la portería contraria, por lo cual no tardó a crear las primeras ocasiones ante el marco del CD Juventud Picanya. Los visitantes aguantaron la presión local y consiguieron la media hora de juego con la portería a cero, aunque sin poner, hasta este momento, en compromisos la meta que estaba defendida por Lucas. Sin embargo, cuando parecia que el Silla estaba empezando a tener más problemas para chafar el área contraria, en el minuto 35, Álex Curado conectó un tiro desde más de 30 metros que besó la red sin que el portero del Juventud Picanya llegara a poder aclarar el esférico. Gol de muy bella factura y 1-0 para alegría sillera. Pero, curiosamente, a partir de este momento se vio la “cara B” de esta temporada del Silla Cf. En dos errores imperdonables que parten del centro del campo y agarran totalmente y muy poco atenta la defensa, además de mostrar una excesiva permisividad con los adversarios, el delantero Josele le dio la vuelta al marcador con dos puntos prácticamente idénticos consiguiendo definir muy bien frente a Lucas (38´ y 42´). 
Después del paso por vestuarios, el Silla asumió el control del balón y se lanzó a por el empate asumiendo el riesgo que el Juventud Picanya culminara alguna contra con un tercer gol que ya hubiera sido definitivo. El insistente dominio siller obtendría sus frutos en el minuto 63 con un chut raído de Andrés que supuso el 2-2. A raíz de la igualada, el equipo y la afición se vinieron todavía más arriba y presionaron todo el posible porque los tres puntos se quedaron a L´Alter. Hasta en dos ocasiones los jugadores del Juventud Picanya aclararon en área pequeña ambos balones que se colaban en la meta visitando y la acción polémica de la tarde se produjo en el 85´al reclamar el público, sobre todo el que estaba situado detrás de la portería, y los jugadores locales un gol “fantasma” que el árbitro no concedió. El Juventud Picanya, con el Silla totalmente volcado en ataque, también disfrutó de una gran oportunidad para ganar, pero Lucas, muy situado, lo evitó con una extraordinaria intervención. Los cinco minutos de descuento que decretó el colegiado resultaron agónicos, pero ya no se produciría más novedades en el marcador dejando un sabor agridulce en los aficionados del Silla que veían como se los escapó una ocasión magnífica para ir consolidándose en el segundo lugar, que a la conclusión de la Liga permite disputar la promoción de ascenso a Preferente.