Cuando he visto publicada la entrevista en Valencia Opinión me he dado cuenta que una frase mía puede tender a la confusión y no por falta de diligencia del lector sino por una pésima expresión por mi parte. Me refiero a cuando digo que mi editorial es de “segunda división”. Editorial Círculo Rojo es un sello de primerísima fila, es más, ahora mismo para mí es sin duda el primero. Lo que pretendía expresar, con evidente torpeza por mi parte, era que mientras las grandes editoriales no tuvieron el arrojo necesario para publicar una novela como la mía, o pretendieron publicarla dulcificando algunas afirmaciones y eliminando directamente otras, Círculo Rojo apostó desde un principio por Josele Sánchez. Para mí es un honor  ser uno de sus escritores y ojalá las ventas de mi novela contribuyan a seguir manteniendo el nombre de Círculo Rojo como garantía de libertad de expresión en una industria, la del libro, demasiado sujeta a los corsés de lo políticamente correcto.